Santa Marta DTCH

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domingo, 10 de noviembre de 2013

Santa Marta recibió con júbilo la llama bolivariana

 

“Sí se puede, sí se puede…”, fue el grito esperanzador y optimista con el que los habitantes de la capital del Magdalena acompañaron el fuego bolivariano que ayer llegó a esta ciudad en medio de un jolgorio y frenesí histórico.

Fue una jornada inolvidable, en donde el calor humano y el sentimiento de ciudad estuvo presente de principio a fin, haciendo partícipes del mismo a los visitantes internacionales, gratamente impresionados por el desbordado entusiasmo.

La antorcha bolivariana ingresó a la Quinta de San Pedro Alejandrino a las 11 de la mañana, de la mano de tres figuras del atletismo colombiano: el ex campeón de las maratones de San Silvestre y de Boston Álvaro Mejía Flórez, el internacional Paulo César Villar y la campeona nacional Cindy Paola Vega.

El fuego fue entregado por los reconocidos deportistas al alcalde Carlos Caicedo Omar, quien frente al Altar de la Patria la mostró al público. A una salva de aplausos le siguió el resonante “sí se puede…”.
 


El alcalde de Santa Marta levanta la llama olímpica en compañía de los deportistas Paulo Villar y Cindy Vega.

Previamente el gobierno local le entregó la bandera de Colombia a los dignatarios de la Organización Deportiva Bolivariana, Odebo, y a los delegados de los comités olímpicos de Perú, Bolivia, Panamá, Ecuador, Venezuela y Chile, a quienes igualmente se les hizo entrega de las llaves de la ciudad.

“Con este recibimiento de la llama ya tenemos una victoria en la mano; nos falta otra, la del 15 de noviembre en Trujillo, Perú, cuando nos oficialicen como sede de las justas”, dijo emocionado Carlos Caicedo.

La antorcha fue conducida desde la Quinta de San Pedro Alejandrino hasta el parque de Bolívar, frente a la bahía local, donde permanecerá encendida hasta hoy. Luego viajará rumbo a Trujillo, Perú, ciudad sede de los XVII juegos bolivarianos que se inician el 16 de noviembre.



Los directivos de la Organización Deportiva Bolivariana, Odebo, recibieron las llaves de la ciudad.

Voces. Los dirigentes deportivos internacionales que acompañaron la antorcha bolivariana expresaron su admiración por el apoteósico recibimiento que los samarios le hicieron al símbolo.

No hubo quien desprendiera de su boca una palabra de desagrado, por el contrario, las voces que se escucharon eran de felicitación.

Luis Alberto Santacruz, del comité olímpico de Chile, encerró en una frase su admiración: “Si este es el comienzo, no me imagino como será el final”, afirmó.

“¡Impresionante!”, fue la palabra con la que el secretario general de la Odebo, el ecuatoriano Uckles Cornejo, calificó la llegada de la tea bolivariana y la bienvenida que le dieron los samarios.


 
El presidente de la Odebo, Danilo Carrera, manifestó que pese a no haber visto la llegada de la tea debido a demora en el vuelo que lo condujo desde Perú a Santa Marta, la percepción que tiene es el de una ciudad y un alcalde con “un deseo profundo de hacer las cosas bien”.

A su turno Meliton Sánchez, del comité olímpico internacional, COI, dijo que “se nota que aquí hay liderazgo”. “Que Santa Marta no se quede aquí en este entusiasmo, que continúe hasta alcanzar la meta”, precisó el dirigente panameño.

Para el peruano Antonio Gómez, del comité olímpico de su país, “esto que he visto me ha dejado impresionado”.

La gloria del atletismo colombiano, Álvaro Mejía, manifestó que en su vida y tras correr en más de 20 países “nunca había visto algo tan majestuoso e imponente”.
 

Confianza. La Odebo, por intermedio de sus dignatarios, sostienen que si bien no se puede dar aún como un hecho que Santa Marta sea la sede de los XVIII Juegos Bolivarianos, tienen la certeza que el día de la designación, a mediados de este mes, oficial habrá una muy buena noticia para los colombianos y de manera especial para los samarios.

“Estamos viendo una ciudad entregada a una causa y eso es un buen síntoma”, dijo Uckle Cornejo, secretario general de la Odebo.

El presidente del Comité Olímpico colombiano, Baltasar Medina, festejó que los visitantes tuvieren un concepto favorable de Santa Marta y manifestó que “la sede está cerca”.

Fuente: El Heraldo

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